Al comienzo de la legislatura, utilizando dos medios complementarios, uno interno y otro externo, se realizó la evaluación del Sistema de Atención a la Dependencia de Castilla-La Mancha, con el fin de analizar el Sistema y, desde ese análisis pormenorizado, comenzar a introducir mejoras en el mismo.
El primero de ellos, consistió en un análisis estadístico del Sistema realizado por el Servicio de Dependencia, sobre la base de datos oficiales publicados por el IMSERSO, la principal conclusión es determinante: 26.919 personas que teniendo resolución de grado de dependencia no disponen de resolución de PIA. Todo ello en un contexto de pérdida de recursos humanos entre los años 2012-2015 del 25%, pasando de 161 a 120 personas.
El segundo de ellos, el XV Dictamen del Observatorio Estatal de la Dependencia de julio de 2015, de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales, que sitúa a Castilla-La Mancha entre las CC.AA. que no aprueban esta evaluación, con una nota de 4,58 puntos, confirmando la tendencia a la baja desde la nota de 7,9 correspondiente a junio de 2011 (inicio de legislatura). Este Dictamen pone de manifiesto los datos negativos de Castilla-La Mancha correspondientes al período julio 2014-junio 2015, cierre de legislatura, con un -3,84% menos de solicitudes; un -4,72% de personas valoradas; un -2,72% de personas con derecho; un -2,26% de personas atendidas; y, un -15,87% de prestaciones de cuidados en el entorno familiar.
De igual modo destaca dos elementos en su análisis: 1) La preocupante pérdida paulatina de personas con derecho reconocido, que denota que las atenciones nuevas se procuran únicamente en la medida en la que se producen bajas en el sistema; y 2) El inmenso reto que va a suponer para la Comunidad Autónoma la incorporación de las personas dependientes con Grado I.
Siguiendo esa fuente de información, en los sucesivos Dictámenes del Observatorio Estatal de la Dependencia, Castilla-La Mancha ha continuado con su evolución: del suspenso en 2015, con una valoración de 4,6 puntos; en 2016 se calificó con un 5,7, alcanzando el aprobado; en 2017 se continúo con la mejoría con una nota de 6,8 puntos; y, en el último Dictamen, se alcanzó el notable con una nota de 8,2 puntos.
Para que cualquier ciudadano o ciudadana de Castilla-La Mancha pueda conocer los datos del Sistema de Atención a la Dependencia, el Gobierno a través de su página web publica trimestralmente los datos del Sistema.
Además, el Gobierno colaboró en junio de 2018 en la celebración del simposio ‘La Atención a la Dependencia. Realidad y Futuro’, con el fin de analizar la evolución del sistema en esta legislatura y valorar los retos a futuro del mismo, concluyendo que la ley de Dependencia supone, desde su entrada en vigor en 2007, “un motor económico” para el país tanto por la creación de empleo, fundamentalmente femenino y en zonas rurales, como por la reversión de fondos a las arcas públicas y que, tras una etapa de recortes y retroceso continuo desde julio de 2012, a partir del segundo semestre de 2015, se ha producido una recuperación en la aplicación de la ley de Dependencia, especialmente, en comunidades autónomas donde los recortes fueron más acusados como Castilla-La Mancha.
