En la IX legislatura se han reducido un tercio los tiempos de tramitación de los expedientes de dependencia, estando más próximo el cumplimiento del objetivo. De este modo frente a los 14,5 meses de tiempo medio de espera en julio de 2015, se ha pasado a 10 meses en diciembre de 2018, según el último dato oficial establecido por el Tribunal de Cuentas, aunque varía de unas provincias a otras. Esta rebaja ha sido posible, entre otras cuestiones, por el programa temporal para reforzar la elaboración de los Programas Individuales de Atención a personas en situación de dependencia (PIA), en los servicios de dependencia de las Dirección Provinciales de Bienestar Social.
El Plan de Mejora del Sistema de Dependencia del Gobierno de Castilla-La Mancha se diseñó ofrecer la mejor atención posible a las personas dependientes, incluida una gestión ágil y eficaz. Desde su puesta en marcha en julio de 2015, y con la eliminación de las tasas administrativas que gravaban a las personas dependientes y el aumento en la confianza en el sistema, se han presentado 56.186 solicitudes nuevas de valoración, se han tramitado 55.606 revisiones de grado de dependencia o del Programa Individual de Atención (PIA). Esto supone que se ha incrementado en un 105% por ciento el volumen de tramitación de solicitudes, pasándose de 660 solicitudes de media en 2014 a 1.353 en 2019.
De manera adicional, el Gobierno de Castilla-La Mancha reduce a la mitad el plazo de valoración de dependencia de los menores de 6 años, de modo que por primera vez se realiza este proceso en un periodo máximo de tres meses.