El Gobierno regional ha emprendido la recuperación de la abandonada gestión del patrimonio público de vivienda de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha con el objetivo de evitar su deterioro y promover su ocupación por personas que lo necesiten, a lo que se ha dedicado cerca de 5 millones de euros en las distintas actuaciones realizadas para adecuar las viviendas.
La Junta de Comunidades cuenta con 9.348 viviendas, 1.803 en la provincia de Albacete, 4.768 en la provincia de Ciudad Real, 750 en la provincia de Cuenca, 562 en la provincia de Guadalajara y 1.465 en la provincia de Toledo.
Desde el inicio de la legislatura, este Gobierno ha entregado más de 800 viviendas. Un ejemplo, las 19 entregadas el 30 de junio de 2017 en Tarancón. Se ha priorizado a personas en situación de lanzamiento por desahucio, así como otros colectivos en situación de especial vulnerabilidad en la adjudicación de viviendas públicas.
A ello debemos sumar, entre otras actuaciones, la firma de los convenios de colaboración tanto por Gicaman como por la propia Consejería de Fomento con el Instituto de la Mujer y con la entidad sin ánimo de lucro Cáritas Diocesana de Toledo para ponerlas a disposición de las personas más vulnerables.
Por otro lado, el 4 de julio del 2017 hemos aprobado el Decreto de medidas para facilitar el acceso a viviendas sujetas a algún tipo de protección pública.
