El Gobierno de Castilla-La Mancha ha adoptado, desde el inicio de la legislatura, diversas medidas para recuperar los servicios públicos de la Junta. Así, ha reincorporado a 189 interinos despedidos ilegalmente en agosto de 2012; ha estabilizado laboralmente a 1.525 profesionales de la Sanidad; ha recuperado 42 orientadores, 80 técnicos de empleo y 33 técnicos de formación despedidos en la anterior legislatura; ha mantenido en la Junta a 307 trabajadores de servicios que iban a ser externalizados con el cambio de gestión del nuevo Hospital de Toledo; ha contratado 43 funcionarios interinos de refuerzo en los servicios de Dependencia; ha impedido la reducción de la mitad de la plantilla del parque móvil de la Junta y ha recuperado prácticamente la totalidad de la plantilla de prevención de riesgos laborales que había en 2011.
Asimismo, también se ha incrementado la plantilla de la Junta en más de 4.300 empleados públicos.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado, por otro lado, un Plan de Impulso de los Servicios Públicos que permite promover cerca de 12.000 plazas de empleo público, lo que supone un 80% más de las 6.600 plazas inicialmente previstas. Con esta actuación, se blindan las plantillas, se reduce la tasa de interinidad y se recupera la calidad de los Servicios Públicos.