El Gobierno de Castilla-La Mancha ha planteado desde el inicio de la legislatura la necesidad de reclamar un nuevo modelo de financiación autonómica que garantice a Castilla-La Mancha los recursos suficientes para financiar adecuadamente sus servicios públicos. Para ello, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas solicitó en septiembre de 2015 el apoyo de todos los grupos políticos con representación parlamentaria y, en este sentido, a lo largo de 2016 el Gobierno regional mantuvo reuniones con todos ellos, así como con otras formaciones y agentes sociales, para hacer un frente común ante el debate de la nueva Financiación Autonómica y analizar el modelo que se propone desde el Gobierno regional, basado en los principios de suficiencia, equidad horizontal y lealtad institucional.
En la VI Conferencia de Presidentes, celebrada en enero de 2017, se acordó crear un grupo de trabajo para empezar a negociar el nuevo sistema de financiación autonómica y el Gobierno regional nombró al catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha, Jesús Santos, como experto por parte de Castilla-La Mancha.
El Gobierno regional, asimismo, participa de manera activa en el Comité Técnico Permanente de Evaluación del sistema de financiación autonómica y en el grupo de trabajo sobre tributos propios, cuyas reuniones tienen un carácter técnico.
En marzo de 2018, el Gobierno regional ha presentado un estudio en en que se analiza el impacto del actual modelo de financiación autonómica en las cuentas públicas regionales, y que determina que Castilla-La Mancha es una de las comunidades autónomas peor financiadas, calculando que cada año que se retrasa la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, Castilla-La Mancha deja de percibir más de mil millones.
Además, con motivo de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado en julio de 2018, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas vuelve a solicitar que se continúe con los trabajos ya iniciados en torno a la reforma del Sistema de Financiación Autonómica, ya que es vital que las comunidades autónomas cuenten lo antes posible con un nuevo modelo que les permita afrontar el mayor gasto social en sanidad, educación y bienestar social. A su vez, ha mostrado su satisfacción sobre la decisión del Gobierno de España de financiar las decisiones de gasto que adopte y que afecten a las comunidades autónomas, así como que la negociación sobre el sistema de financiación autonómica se aborde en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera.
En septiembre de 2018, el Presidente García-Page participa en una reunión interautonómica con los presidentes de Aragón, Galicia, La Rioja, Asturias y Castilla y León en la que se ha firmado una declaración institucional instando al Gobierno de España a establecer como prioritaria la definición del nuevo modelo de financiación autonómica. En este marco, traslada la necesidad de reclamar al Estado la puesta en marcha de una estrategia nacional contra la despoblación y la dispersión geográfica, considerando que el territorio tiene que pesar en el reparto de la financiación.
En el transcurso del Debate sobre el Estado de la Región de 2018, el Presidente de Castilla-La Mancha propone un Pacto en torno a la financiación autonómica que desde los principios de multilateralidad y solidaridad garantice el blindaje del acceso igualitario a la educación, la sanidad y los servicios sociales.
