El Gobierno de Castilla-La Mancha promueve una estrategia de fomento del turismo de naturaleza, compatible con la conservación de los recursos naturales protegidos, fundamentalmente en los Parques Naturales, considerando el uso público como uno de los motores del desarrollo socioeconómico de las zonas rurales marginales.
La reapertura de los 21 Centros de Interpretación de los diferentes Espacios Protegidos de Castilla-La Mancha ha logrado casi quintuplicar las visitas con respecto a 2015, hasta alcanzar aproximadamente las 170.000, con el consiguiente beneficio económico y laboral en sus respectivas zonas de influencia.
Para su correcta gestión, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha autorizado una encomienda de gestión, financiada con 660.000 euros, para que la empresa pública GEACAM preste el servicio y la asistencia a los visitantes de los Centros de Interpretación y Puntos de Información Turística de los parques naturales de la región.
Otras medidas tomadas en la mejora de la gestión de la Red de Áreas Protegidas tienen que ver con los tratamientos preventivos contra incendios forestales, los Planes de Gestión de los Espacios de la Red Natura o la mejora de diversas infraestructuras viales. Además, se está llevando a cabo la adecuación y señalización de sendas de los Espacios Protegidos, como por ejemplo en el Paraje Los Chorros, y Fuente de la Plata (Albacete).
Por otra parte, para compatibilizar la producción agraria con la preservación medioambiental, Castilla-La Mancha ha activado una ayuda de 208,2 euros por hectárea para los cultivos herbáceos de secano en las Zonas ZEPA durante 5 años, por un importe de 47 millones de euros y con cargo al Programa de Desarrollo Rural (PDR), del que prevé que se beneficien unas 40.000 hectáreas de agricultores profesionales, en pueblos de todas las provincias de la región.
En la actualidad, en Castilla-La Mancha los espacios de la Red Natura incluyen 72 ZEC con una superficie de 1.565.220 hectáreas, y 39 ZEPA, con una superficie de 1.585.473,51 hectáreas.
Solo las 8 ZEPA de ambientes esteparios y en menor medida la ZEC/ZEPA de la Laguna de El Hito y la ZEC /ZEPA de Llanuras de Oropesa, Lagartera y Calera y Chozas se corresponden con ambientes agrícolas. Esto supone que Castilla-La Mancha aporte el 13,6% del territorio nacional bajo la figura de Red Natura. El 23,5% de nuestra región es Red Natura y dentro de esa Red Natura están las zonas de especial protección para las aves que representan alrededor de 201.000 has.
Esas áreas, de carácter estepario en Castilla-La Mancha, tienen un origen derivado de las prácticas ganaderas y agrícolas, desarrolladas históricamente en estas zonas y que transformaron los bosques xerófilos que poblaban las grandes llanuras, en inmensos campos desarbolados de cultivos de secano o pastizales escasamente cubiertos por vegetación herbácea. Las prácticas tradicionales de agricultura extensiva de secano y ganadería ovina extensiva, responsables de la existencia de la abundante y rica comunidad de aves esteparias, mantienen las condiciones de hábitat que estas especies requieren, existiendo un equilibrio entre estas y las actividades humanas.
Las 8 ZEPAS para las aves esteparias existentes en ambientes agrarios en Castilla-La Mancha abarcan una superficie total de 201.412,37 ha. De esas hectáreas situadas en ambientes agrarios, 185.000 ha (92%) son destinadas para usos agrarios y suponen apenas un 4% de las 4.097.000 ha de SAU (superficie agraria útil) regional: el 4 % de la superficie agrícola útil de Castilla-La Mancha. En esas 185.000 hectáreas de superficie agrícola útil, hay 18.000 hectáreas totales de viñedo, que suponen el 4 % de la superficie de viñedo de Castilla-La Mancha.
Por otra parte, se ha concedido el Premio regional de Medio Ambiente 2018 a la Fundación ‘Global Nature’ por su compromiso ambiental.
