Los Servicios Sociales son fuente de riqueza y empleo dentro de Castilla-La Mancha. El Gobierno concibe la aplicación de la Ley de Dependencia y la prestación de servicios como una palanca para la creación de empleo a través de los distintos servicios recogidos en el catálogo de prestaciones.
El año 2019 finaliza con 16.700 empleos en el Sistema de Dependencia. De ellos, 6.700 son directos e indirectos asociados al Sistema de Dependencia dentro de los nueve servicios que se prestan en el Sistema de Dependencia. Ese mismo año se realizó la habilitación de 1.882 profesionales, auxiliares y gerocultores, la formación de 1.440 cuidadores con el programa ‘Cuidando a quienes cuidan’, y el alta en la Seguridad Social de 1.944 personas cuidadoras no profesionales.
En el segundo trimestre de 2020 los empleos en este Sistema en la Región son 23.360, según el Informe de Empleo en el Sector Servicios Sociales del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
2021 finaliza con 23.366 empleos directos dentro del Sistema de Atención a la Dependencia. Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma en la que más aumentan en 2021 los contratos indefinidos a tiempo completo dentro del Sistema, con un 14,1%, más de 7 puntos por encima de la media nacional. Es también en la que más ha aumentado los contratos indefinidos en los centros residenciales de atención a las personas mayores, con un 17,2%, situándonos casi 14 puntos por encima de la media nacional, que está en el 3,5%. En este sentido, las 343 residencias de atención a personas mayores con las que cuenta Castilla-La Mancha, entre las que se incluyen públicas, privadas o con algún tipo de concierto, generan alrededor de 16.000 empleos en el ámbito de los servicios sociales, la mayoría de ellos para mujeres. Se trata de un empleo muy ligado al territorio.
En el segundo trimestre de 2023 las afiliaciones a la Seguridad Social en el Sistema de la Dependencia en Castilla-La Mancha ascienden a 28.247, lo que supone casi 5.000 personas más empleadas en el sector entre 2019 y 2023.
Cabe destacar el Servicio de Ayuda a Domicilio, cuyo Plan de Formación de auxiliares incorporó en 2020 los retos de los recursos de proximidad, la atención psicosocial de las personas en situación de dependencia, los recursos y las herramientas para la gestión positiva de las emociones de los equipos profesionales, favoreciendo de este modo su autocuidado. El Servicio de Ayuda a Domicilio llegó a 22.086 personas en 2019, que fueron atendidas por 5.580 auxiliares. En 2022 se destina a este servicio más de 50 millones de euros, 15 millones más que en 2015, llegando a todos y cada uno de los pueblos de la Región, con más de 37.500 personas beneficiarias y con una red de profesionales que se ha visto incrementada en 1.000 desde 2015, superando las 6.000 personas empleadas.
Hay que hacer mención, asimismo, al empleo de personas cuidadoras no profesionales del sistema de la dependencia. Según los datos que ofrece la Tesorería de la Seguridad Social, en junio de 2019 se contabilizaban 1.324 personas empleadas en esta actividad, 2.410 en mayo de 2022 y 2.642 en junio de 2023, lo que pone de manifiesto un incremento de 1.318 personas empleadas en relación con la prestación de estos cuidados a personas dependientes en nuestra Región.