En Castilla-La Mancha existe una deducción en el tramo autonómico del IRPF por el arrendamiento de vivienda habitual vinculado a determinadas operaciones de dación en pago.
La deducción de la cuota íntegra autonómica es del 15 por 100 de las cantidades satisfechas durante el ejercicio correspondiente por el arrendamiento de la vivienda habitual situada en Castilla-La Mancha y que constituya residencia habitual, con un máximo de 450 euros, siempre que se cumplan los siguientes requisitos:
- Que el contrato de arrendamiento esté vinculado a una operación de adjudicación de la vivienda habitual en pago de la totalidad de la deuda pendiente del préstamo o crédito garantizados mediante hipoteca de la citada vivienda.
- Que la suma de la base imponible general y de la base imponible del ahorro menos el mínimo por descendientes, no supere la cuantía de 12.500 euros en tributación individual o de 25.000 euros en tributación conjunta.
- Que en la autoliquidación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas se consigne el número de identificación fiscal del arrendador de la vivienda.
Esta deducción se mantiene para el ejercicio 2022.