Castilla-La Mancha cuenta con cinco provincias en cada una de las cuales, con diferentes climas y orografías, crecen las diferentes variedades de uva. Profundamente arraigada en la vida de sus habitantes, las zonas vinícolas han desarrollado una cultura del vino que se puede conocer en cada una de sus bodegas, y en las localidades en que se ubican.
La amplia modernización adaptada desde el último tercio del siglo XX ha generado más de seiscientas marcas comercializadas bajo la Indicación Geográfica Protegida Tierra de Castilla, con unas cualidades excepcionales en cada una de sus variantes.
Desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural se esta trabajando en la constitución de una Interprofesional Vinícola de Castilla-La Mancha bajo esta indicación geográfica; así lo reflejan los pasos que se van dando en los Comités regionales Vitivinícolas que se celebran. En concreto, en el Comité Regional Vitivinícola de noviembre de 2023 se presenta un primer borrador de estatutos. Y en la reunión del mismo órgano, celebrada en junio de 2024, se analizan las propuestas recibidas.