El Gobierno ha mantenido contactos con las entidades que representan al sector agroalimentario de Castilla-La Mancha. En estos encuentros se está trabajando la creación de Mesas Técnicas de Trabajo para el fomento de una producción segura y sostenible, así como en una alimentación sana y equilibrada.
La agricultura familiar es uno de los pilares de la producción agroalimentaria, que ofrece una rica y variada materia prima alimentaria que cuenta cada vez con más reconocimiento internacional. Se han batido récord de exportaciones a lo que ha contribuido el Plan Adelante y el Plan estratégico de Internacionalización. Además, somos una de las Comunidades con mayor superficie ecológica pues incentivamos la producción ecológica, que se traduce en calidad de los alimentos y mejora del medio ambiente. Hemos conseguido generar el interés del sector cooperativo en su conjunto para crear integraciones comerciales, y lo apoyamos, incentivando la creación de las figuras de las Entidades Asociativas Prioritarias de Interés Regional (EAPIR) y las Agrupaciones de Productores (APPaa), para fortalecer el eslabón productor-transformador de la cadena alimentaria y para que lleguen con más y mejores garantías de negocio a nuevos mercados. De esta manera, las cooperativas adquieren más tamaño y son capaces de negociar mejor en nombre de los agricultores y ganaderos en la cadena agroalimentaria y defienden mejor, por lo tanto, el producto de los agricultores y ganaderos. Hemos puesto a disposición de empresas y cooperativas agroalimentarias de la región 120 millones de euros para que realicen inversiones que mejoren su competitividad y la calidad de la producción.
Al mismo tiempo y de forma continuada y simultánea se está trabajando con distribuidoras de alimentación de distinta proyección en nuestra región para la firma de Acuerdos de colaboración que permita garantizar los estándares de calidad y seguridad que favorezcan la confianza de los consumidores en los productos producidos en nuestra región. En estos acuerdos también se busca la forma ágil y más eficaz de tramitar las alertas sanitarias con el objetivo de la retirada rápida de alimentos que puedan resultar sospechosos de no ser seguros para el consumo.
A medida que avanza la legislatura el Gobierno está retomando y revitalizando órganos y espacios de interlocución que fueron relegados y vaciados de contenido en la anterior etapa. Así, el 2017 ha sido el año en el que se ha retomado la actividad de la Comisión Regional de Seguridad Alimentaria y el Comité Avícola.
De manera simultánea a todo el trabajo que se está realizando en la mejora de la seguridad alimentaria se están impulsando acciones formativas para actualizar conocimientos para los profesionales de la función pública encargados de inspeccionar y velar por este tema. La actualización de la normativa en el etiquetado de productos ha hecho necesario un reciclaje de los profesionales a las novedades que aporta este cambio de normativa.
