Desde la toma de posesión en 2015 del nuevo Gobierno de Emiliano García-Page se ha extendido la cobertura de banda ancha. Cuentan con fibra óptica 183 núcleos de población de la región, que engloban a más del 70% de la población. Y la cobertura 3G y 4G llega a un millar de núcleos de población que agrupan al 99% de la población.
Además, en los presupuestos de 2018 se contemplaban 2,5 millones de euros para una nueva línea de subvención destinada a desplegar fibra óptica en las zonas rurales.
El Gobierno regional proyectó igualmente en 2018 las actuaciones necesarias para desplegar 4G en pequeñas localidades rurales de la comunidad autónoma, en las cuales no existe en la actualidad previsión de que los operadores presten el servicio de banda ancha en movilidad (BAM). Es decir, donde no hay previsión de despliegue de redes 3G ó 4G.
Elevar los niveles de seguridad en la red es también una prioridad para el Gobierno de Castilla-La Mancha, por ello se han reforzado las medidas de prevención y lucha contra la ciberdelincuencia. En el año 2017, se superaron satisfactoriamente dos auditorías donde se ha puesto en valor la madurez de organización en cuanto a seguridad, cierre de incidentes y mejoras continuas en gestión.