El Gobierno regional ha puesto en marcha, en diciembre de 2022, un proyecto piloto de rehabilitación de viviendas púbicas propiedad de ayuntamientos en municipios escasamente poblados o en riesgo de despoblación para destinarlas al alquiler social, con el objetivo de asentar población en dichas zonas. Mediante este programa se concede una subvención a la entidad local y es la Junta de Comunidades, a su vez, quién lleva a cabo directamente la actuación. A cambio, el ayuntamiento adjudicatario se compromete a destinar las viviendas rehabilitadas al alquiler social.
Se trata de un proyecto piloto que busca el asentamiento de ciudadanía en las zonas de baja densidad demográfica de la región para abordar el reto demográfico. Para esta primera edición se destinan 988.000 euros y los municipios que se benefician de estas subvenciones son: Alcalá del Júcar en Albacete; Ballesteros de Calatrava en Ciudad Real; Cardenete y Almovodar del Pinar en Cuenca; El Recuenco y Peñalén en Guadalajara; y Los Navalmorales en Toledo.
En esta línea, se ha presentado, en marzo de 2023, el Plan 10.000, una iniciativa basada en la colaboración público-privada para que lograr que exista una mayor oferta de vivienda en venta y alquiler a precios asequibles, a cambio de ofrecer una ayuda de hasta 50.000 euros por vivienda a la empresa promotora.