El Gobierno de Castilla-La Mancha trabaja en la creación de una Ventanilla Única como puerta de acceso a una renta que permita a las personas más vulnerables y en riesgo de exclusión salir de la pobreza. Lo hace desde los servicios sociales de atención primaria, que son quienes tienen el primer contacto con las y los usuarios, y siempre desde la óptica de dirigirles hacia el mercado de trabajo, ya que la mejora de la empleabilidad es la mejor garantía para salir de una situación de riesgo de exclusión.
En relación con la coordinación entre los sistemas de empleo y servicios sociales, Castilla-La Mancha participa en la Red de Inclusión Social (RIS), un proyecto piloto del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, con un proyecto en Torrijos, que pretende generar una metodología de intercambio de información entre los Servicios Sociales y los Servicios de Empleo regionales y el propio Ministerio, para alcanzar más efectividad en los itinerarios de inclusión que desarrollan para personas en riesgo de exclusión. En 2019 comenzó este proyecto experimental a funcionar desde la idea de que el empleo es una de las mejores maneras de incidir sobre la pobreza, la exclusión y la vulnerabilidad.