El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha dio luz verde, el 11 de marzo de 2020, al Decreto regulador de las profesiones turísticas y del inicio de actividad de las empresas de información turística de la región después de seis borradores y más de 23 reuniones en las que se tuvieron en cuenta todas las sensibilidades de diferentes ámbitos.
El Decreto establece, como única vía de acceso a la actividad profesional de guía de turismo, la habilitación mediante la realización de pruebas de aptitud convocadas por la Consejería competente en materia de turismo, sin perjuicio de que quienes posean la habilitación como guías de turismo por otras comunidades autónomas puedan desarrollar libremente su actividad en Castilla-La Mancha.
También se adapta al régimen jurídico de la libre prestación de servicios para los guías de turismo establecidos en cualquier Estado miembro de la Unión Europea, con el objeto de reforzar el mercado interior de servicios de la Unión Europea de los profesionales de la información turística.
Asimismo, mediante esta normativa se establece un régimen jurídico para las empresas de información turística, que han aparecido en los últimos años como uno de los elementos más innovadores dentro de este subsector turístico, intentando dar una respuesta institucional y normativa a los nuevos ámbitos de demanda y de prácticas de las personas consumidoras de la información turística en Castilla-La Mancha.
El Plan Estratégico de Turismo 2020-2023 persigue dos retos fundamentales para Castilla-La Mancha: aprovechar y potenciar los beneficios que la actividad turística conlleva basándose en decisiones tomadas a partir de los sistemas de inteligencia turística y minimizar o eliminar los efectos negativos que puede generar en consonancia con una estrategia global de sostenibilidad. Entre los puntos clave de esta Plan, está el de la inspección contra el intrusismo y las actividades ilegales en el sector turístico.
En febrero 2020 y enero de 2022, el Gobierno regional publicó el Plan de Inspección en Turismo para cada uno de esos años con el objetivo de detectar y perseguir el intrusismo tanto en los alojamientos como en el ejercicio de la profesión de guías turísticos. Este plan de inspección va dirigido a empresas de alojamiento turístico, tanto hotelero como extra hotelero, empresas de intermediación turística, empresas de restauración, empresas de turismo activo y ecoturismo y empresas de información turística y profesiones turísticas.